¡Feliz Día Mundial de la Infancia!

Hoy es un día para celebrar a los más pequeños, a quienes llenan nuestros días de alegría, curiosidad y esperanza. Cada niño y niña merece un mundo donde sus derechos sean protegidos, su voz sea escuchada y sus sueños puedan volar sin límites.

Hoy, doce meses después, las cicatrices del desastre siguen visibles, pero sobre ellas ha crecido algo mucho más fuerte: la certeza de que, en los momentos más oscuros, lo que nos salvó fue la solidaridad.

Recordemos la importancia de garantizarles un entorno seguro, acceso a educación de calidad, salud y, sobre todo, mucho amor. Ellos son el presente que construye el futuro, y es nuestra responsabilidad cuidar su magia y potenciar su increíble potencial.

Trabajemos juntos por un futuro brillante para todos ellos. ¡Porque un niño feliz es la promesa de un mañana mejor!